Ser maestro requiere un nivel de compromiso y responsabilidad extremadamente alto, pero también ofrece la recompensa de saber que su trabajo impacta directamente en la vida de sus alumnos. Enseñar desde lo más básico como leer, sumar, o entender hechos del pasado, hasta conciliar su carácter e intereses.
Permitir e impulsar al personal docente a desarrollarse profesionalmente, es velar por un ambiente laboral y educacional exitoso e innovador, sabiendo que un plan integral permite al profesorado explotar al máximo sus habilidades y destrezas indispensables para relacionarse con sus estudiantes mediante el uso práctico y productivo de la tecnología.
Programas como Apple Teacher y Apple Professional Learning permiten explorar ideas para hacer las clases de modos más activos utilizando el iPad, la Mac y las apps en el aula.
Invertir en el desarrollo profesional de los docentes es impactar directamente en el patrón educativo; la constante actualización y la implementación de nuevas tecnologías y modelos pedagógicos se convierten en diferenciador de instituciones, atrayendo la atención de padres que buscan sistemas no convencionales para la formación académica, social y cultural de sus hijos.
Incluso antes de la crisis sanitaria originada por el COVID 19, ya era evidente que el aprendizaje atravesaba por una crisis mundial, misma que incrementó en un tercio en los países de ingreso bajo y medio; se estima que un 70% de los niños de 10 años no puede leer y comprender un texto simple según un informe publicado por el Banco Mundial en conjunto con otras organizaciones. Antes de la llegada de la pandemia la tasa se encontraba por debajo del 57%.
Entender y saber aprovechar el máximo potencial del uso de la tecnología como maestros, permite transmitir y fomentar en los alumnos su uso a conveniencia y beneficio; previniendo que si en un futuro alguna emergencia vuelve a forzar el cierre de las escuelas la educación pueda tomar un rumbo mejor dirigido y no un camino a ciegas como el que se vivió en 2020 y 2021.
“Quien se atreve a enseñar nunca debe dejar de aprender”
– John Cotton Dana